miércoles, 16 de julio de 2008

¿Existió el mago Merlín?




Merlín fue un mago galés que se cree que vivió a finales del siglo VI d.C., y una de las figuras centrales del ciclo artúrico. Es sin duda el mago más famoso de la historia, e inspirador de otros tantos magos de la literatura universal.




Según el especialista bretón Jean Markale, Merlín es una figura polifacética que personifica diferentes arquetipos del mundo mítico celta, como el druida, el bardo, el hombre salvaje, el chamán y el profeta.

La historia de Merlín está repleta de misterios y como su vida está relatada principalmente por obras literarias, o de poca credibilidad histórica, se hace difícil señalar la fecha exacta de su nacimiento.




Según algunas versiones, Merlín fue engendrado por el demonio (súcubo) Asmodeo, un espíritu corrompido que se unió ilícitamente a una monja. Otras versiones menos truculentas sugieren que Merlín fue concebido por su madre sin ninguna intervención masculina. Finalmente, otros creen que lo engendró la fuerza mágica de la antigüedad.




En todo caso, parece ser que Merlín fue creado al principio para atraer a los humanos al lado oscuro, pero al crecer decidió hacer precisamente lo contrario: se convirtió en guia espiritual de su época, y en consejero de diferentes reyes, como Vortigern, Uther Pendragón y el famoso Arturo de Camelot.




Se considera a Merlín el mago más poderoso de la historia. Según se cuenta en las diferentes obras literarias que lo tienen de protagonista, era capaz de hablar con los animales, de cambiar de forma, de hacerse invisible, y también de controlar el clima y los elementos, aunque estas habilidades las empleaba con sumo cuidado para no enfurecer a la poderosa Naturaleza. En la novela medieval Lanzarote y Ginebra se contaba de él lo siguiente: "Conocía la esencia de todas las cosas, su transformación y su renovación, conocía el secreto del Sol y de la Luna, las leyes que rigen el curso de las estrellas en el firmamento; las imágenes mágicas de las nubes y el aire; los misterios del mar. Conocía los demonios que envían sueños bajo la Luna. Comprendía el grito áspero de la corneja, el volar cantarín de los cisnes, la resurrección del fénix. Podía interpretar el vuelo de los cuervos, el rumbo de los peces y las ideas ciegas de los hombres, y predecía todas las cosas que sucedían después."




Se decía que Merlín tenia contactos con las hadas, los gnomos, e incluso con los dragones; se le considera el único hombre que se ganó el respeto y la admiración de estos monstruos, no sólo por su bondad y sabiduría sino por sus dotes artísticas (fue un maestro de la poesía y la literatura).




Acabó sus días en el bosque de Brocelianda (Bretaña), donde fue recluido en un árbol por su compañera Vivian. Markale interpreta el mito de la prisión merlínica en el bosque, como el símbolo de la unión cósmica entre el hombre y la naturaleza. Otras versiones mencionan como la celda en la que fue recluido a una cueva, y otras a una jaula de cristal. Y según se cuenta allí estaría todavía esperando que alguien lo libere.

La leyenda de Merlín bebe de dos fuentes históricas fundamentales: La tradición de Lailoken y la historia de Ambrosio el Niño.




Lailoken era un bardo y poeta que vivía en el actual Strythclide (suroeste de Escocia), y que era un importante consejero del rey Gwenddolau. Cuando su señor fue derrotado y muerto en la batalla de Arfderydd (actual Arthuret) en el año 574 se sumergió en la locura y abandonó la civilización. Huyó a los bosques de Celidon donde se pasó tres días sollozando y allí se dedicó a profetizar en compañía de un lobo. Así relata la tradición su historia: "Lloró durante tres días y rechazó todo alimento, ¡así de grande era el dolor que le consumía! Fuera de sí, alzó su voz en el aire y tras ello, sin ser visto, huyó a los bosques. Así es como hizo su entrada en Celidon y era feliz de vivir entre los fresnos, y se asombró al ver a los animales salvajes viviendo en los claros. Bien pronto dejó de temerlos y comenzó a frecuentarlos. Se alimentaba de plantas silvestres y de sus raíces, gustaba de los frutos de los arbustos. Se convirtió en un iniciado de los bosques."




La leyenda de Lailoken fue transportada a Gales donde el personaje tomó el nombre de Myrddin. Se trata de un mito pancéltico que está presente así mismo en Irlanda, lugar en el que los ciclos mitológicos recogen la historia del bardo Suibhne.




La otra fuente del mito lo constituye la figura de Ambrosio el Niño, que fue contemporáneo del Rey Arturo. Profetizó en la fortaleza de Dinas Emrys la victoria del dragón blanco (que representaba a los sajones) sobre el dragón rojo (emblema de los Pendragon y aún hoy símbolo nacional galés).




La forma actual del nombre Merlín fue fijada por el cronista galés Geoffrey de Monmouth, que alteró el original galés para evitar resonancias con el francés merde.

3 comentarios:

El Duende Que Camina dijo...

Siglo VI d.C.....¡ya te digo¡¡¡...y yo que te hacía más joven...:)

calvito dijo...

Me apunto a la tesisi de que lo engendró el demonio, jeje.
A
y! merddin, merddin!

Unknown dijo...

Estoy segura de que existio y de que antes de no tenerle miedo a nada fue un hombre que paso mucho miedo pero se enfrentó a el.El amor surge del miedo y cuando ya no tienes miedo a morir eres inmortal.Me gustaria encontrar a mi Merlin.