viernes, 25 de abril de 2008

De modas y costumbres...

Llego una vez más a mi casa, con el mando abro la puerta del garaje, enciendo las luces, espero a que baje la puerta y circulo en la dirección indicada. Si encuentro a algún vecino/a le saludo y si va cargado con bolsas le ofrezco mi ayuda. Paro en el portal para recoger el correo y si entra algún vecino espero por él, evitando que se cierre la puerta del ascensor,aunque soy fumador, jamás fumo en el ascensor; también le saludo. Llego a mi puerta, mi perro me saluda y yo voy a saludar a los míos, aunque no haya tenido un buen dia laboral. Soy un loco de la música, pero procuro no obligar a mis vecinos a escuchar lo que yo escucho y si fuese así, mejor invitarlos a una cerveza y pasar un rato agradable con alguien que comparte tu vida durante más de 30 años, ojalá sea así.

Las obras y reparaciones jamás las hago en domingo o festivo, por lo de cumplir la ley y sobre todo para no molestar y mucho menos a partir de las 10 de la noche.

¿qué es lo que nos está pasando?, ¿es tan difícil procurar llevarse bien con los vecinos?, ¿nuestros padres, acaso, no nos han enseñado esto?, ¿ha caído la cortesía en deshuso?, ¿qué opinais de todo esto?, ¿cuales son vuestras experiencias?.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo opino que es imposible llevarse bien con los vecinos. A la mínima salta la chispa y ya se montó. En cuanto juntas a dos o tres humanos, aparece la bronca de uno u otro modo.

calvito dijo...

Hay de todo, donde vivo desde hace un año somos todos jóvenes y mis vecinos parecen salidos de un casting de buenos modales, es una gozada!
Como anecdota os puedo decir que en una ocasión había junto a los buzones una carta con una nota que ponía algo así " Sr cartero, el nombre que figura en la carta no coincide con esta dirección, muchas gracias"
Hola suarez, si te fijas, en este blog cohabitamos unos cuantos humanos, más Merlín :-) y nos llevamos tan bien!

merlin dijo...

Eu estou dacordo con Calvito, sobretodo porque na miña comunidade veciñal apenas quedan un par de cazurros coas sus respectivas, pero pouco a pouco éstes van quedando aislados e afastados do resto, que somos tolerantes e respetamos ás persoas, e se temos que botar unha man para axudar a algo, o facemos, sempre e cando a causa sexa lexítima e non vaia en contra de ninguén

merlin dijo...

Saúdos suárez, agardamos que se neste blog saltan chispas sexa polos foguetes das festas que compartiremos xuntos no futuro.
Unha aperta, e benvido

anonimo_num_x dijo...

La tv y determinada prensa se empeña en hacernos ver que gente que no ha hecho ningún mérito para ello se nos muestre como modelo a seguir. Gente chavacana,ignorante y con un alto grado de mala educación se convierte a diario en referente para montones de personas que a partir de ese momento deciden convertirse en los famosos de su barrio, comunidad o peña. Este tipo de gente, es fácilmente reconocible. Además de ser incapaces de dar las gracias ante cualquier gesto que se tenga con su persona, usan situar su mirada en el más lejano horizonte mostrando un total desinteres en lo que sucede a su alrededor. En la fila del super jamás te dejarán pasar delante aunque tu lleves una barra de pan y él/ella la compra para aguantar dos meses en caso de guerra nuclear. No harán el más mínimo gesto de gratitud si le cedes el el paso desde tu vehículo.Muy al contrario, permanecerán con su vista pegada al horizonte y considerarán que siempre han de pasar delante de ti porque así se lo permite su status social. Hablarán por el móvil con la mano tapándose la boca y pasarán por delante de las cámaras de los turistas ocultando su cara tras un periódico. Irán de incognito a regatear la compra de un bolso falso en la céntrica calle Real de nuestra ciudad sin tan siquiera mirar la cara de su vendedor, utilizando unas gafas de sol que tan sólo dejarán a la vista lo esencialmente necesario para llevar a cabo la operación. Lo que después le suceda a su vendedor le importará tres puñetas y le exprimirÁ el precio hasta precios irrisorios.
Yo, de tanto encontrarme a este tipo de personajes que ultimamente parecen reproducirse en progresión geométrica, en ocasiones, he caido en la tentación de no dejar pasar a nadie más en la cola del super, ni ceder el paso desde mi vehículo y en multitud de ocasiones bajar por las escaleras para evitar el ascensor.A lo mejor esto responde a tu pregunta Duende. Acaba uno tan hasta las narices de estos personajillos que sin quererlo te acabas convirtiendo en uno de ellos.

Un Saludo

merlin dijo...

Gracias de corazón, de nuevo, anónimo nº x por tu reflexión. Es reconfortante saber que hay personas como tu, que piensan parecido a uno mismo, y conseguir hacer que no te sientas un bicho raro cuando te encuentras a gente como la que tan bien has descrito.
Hay que ser fuertes para ser capaces de no entrar en su juego, y para ello necesitamos muchas veces que personas como tu nos lo recuerden.
Gracias de nuevo, amigo

El Duende Que Camina dijo...

Me niego a volverme como ese núcleo de población que tan bien describes, aunque, a veces, me siento gilipollas por hacer cosas que parace que han caído en el olvido. Seguiré luchando, saludando, cediendo el paso, procurando ser cortés...Hay algo que me revienta sobremanera;entrar en un ascensor en el que viene un vecino, que reconoces y te reconoce, saludarlo y que no conteste, se estira aunque sigue midiendo menos que yo y se queda mirando para el horizonte, mística pura, no ha habido ninguna discusión, nada, pero no saluda...hasta que llega Navidad, entonces, de repente te felicita las fiestas.Tremendo, esperpéntico, durante 11 meses nada y el mes del consumismo por autonomasia, se vuelve persona y saluda...¡yo no sabía contar hasta 10, pero,últimamente, estoy aprendiendo.....!

El Duende Que Camina dijo...

Se me olvidaba,¡bienvenido Suárez!.